8 tips imprescindibles para prepararte para un exámen
A continuación, te presentamos 8 tips muy útiles y completos para preparar un examen con eficacia. Te explicaremos algunos consejos y secretos para rentabilizar tus horas de estudio y obtener los mejores resultados.
Antes de sentarte y comenzar a estudiar debes reunir todo el material, apuntes, anotaciones y libros. Debes comprobar que tengas toda la información de la materia y repasar tus anotaciones para saber si son correctas. Puede ayudar que te reúnas con algún compañero para verificar la información.
Ten en cuenta que este es el punto de partida. Si tu material de estudio no es de calidad, será difícil que consigas buenos resultados en tu examen.
Necesitarás contar con un espacio fijo, ya sea tu habitación, la biblioteca o cualquier otro ambiente. En él debes sentirte cómodo y tener todo tu material de estudio al alcance. Al respecto, existen algunas recomendaciones que deberás tener en cuenta:
Contar con una planificación ajustada a ti y al tiempo que dispones será fundamental. Sobre todo para evitar incertidumbres de cómo y cuándo estudiar. Deberás elaborar un plan que contemple las horas estudio y el tiempo de descanso. Al mismo tiempo, debe ser flexible, sencillo y práctico. Puedes utilizar aplicaciones o sistemas como Educalink, las cuales ayudan a organizar la planificación educativa.
Organiza cada sesión en un horario regular para crear un hábito y de acuerdo a la dificultad de los temas. Ten en cuenta que por cada hora de estudio deberás descansar 5 minutos y que las temáticas más complejas es mejor abordarlas por la mañana. Así, podrás llegar a los días previos al examen con la parte más sencilla del programa de la materia.
Vuelca todo el plan en un calendario bien detallado en el que puedas ver claramente las horas de estudio, los materiales que necesitarás y el tiempo qué destinarás a otras actividades. Estudia de forma constante y cumple con el calendario, así evitarás esfuerzos innecesarios y lograrás un mejor aprendizaje en menor tiempo.
Las técnicas de estudio son un conjunto de herramientas y procedimientos, de carácter cognitivo, destinadas a facilitar el estudio y el aprendizaje de una determinada materia. Utilizarlas correctamente te servirá para mejorar la calidad y la eficacia del tiempo de estudio.
Si bien existen diferentes técnicas de estudio, a continuación, te presentamos un método de seis fases (2).
Esquemas | Características |
---|---|
De llaves | Utilizados para representar ideas que se autocontienen y tienen distinta importancia en el texto. |
De flechas | Sirven para representar enlaces de hechos, dependencias o causas. |
De cajas | Utilizados para representar estructuras jerárquicas y organizaciones. |
De flujos | Representan un proceso o una actividad que se realiza por pasos o ciclos. |
Saber con antelación el tipo de examen al que te enfrentarás será de mucha ayuda al momento de prepararlo.
El examen de opción múltiple o tipo test es uno de los más habituales en las universidades. Está dentro de las pruebas denominadas “objetivas” (5). No requiere elaboración escrita y consiste en seleccionar la respuesta correcta entre las opciones dadas.
Este tipo de examen requiere mayor amplitud, por lo que es recomendable que estudies el temario de una forma más analítica. Debes tener comprensión del tema, pero al mismo tiempo prestar atención a memorizar datos más concretos.
Al momento de realizarlo, lee atentamente las instrucciones, empieza por responder aquellas preguntas que sean más fáciles y sigue con las que tengas mayor dificultad. Deberás decidir si responder o no aquellas preguntas que no sepas, dado que en general, se penalizan las respuestas incorrectas.
En el examen de desarrollo o tipo ensayo se parte de una pregunta o enunciado general y tu tarea consistirá en desarrollar una respuesta argumentada acerca del tema.
Debes prestar especial atención a la consigna y ceñirte a responder lo que se pide sin divagaciones y de forma ordenada.
Practica este tipo de examen realizando ensayos, así podrás ir estructurando posibles respuestas. Comienza el examen leyendo todas las preguntas, continúa respondiendo las que sepas mejor. Pon atención a la redacción, la síntesis y ortografía. Antes de entregar, repasa tu texto para verificar que no hayas olvidado nada importante.
Si bien la base de estudio para un examen oral y para un examen escrito es la misma, la forma de prepararlo será diferente. En el examen oral el principal objetivo es mantener la calma, ya que los nervios pueden jugarte una mala pasada. Teniendo en cuenta esto toma nota de las siguientes recomendaciones que te servirán para preparar este tipo de exámenes mejor:
Autoevaluarse es una de las formas más efectivas de comprobar el nivel de conocimiento alcanzado y conocer cualquier tipo de falla que puedas tener. Sirve para familiarizarse con el momento del examen, ganar seguridad y afianzar los conocimientos.
Si sabes el tipo de prueba al que te enfrentarás, será muy útil que hagas autoevaluaciones de ese formato. Toma en consideración el tiempo que vas a disponer y concéntrate como si estuvieses en la prueba real. Cuando realices la corrección hazlo con rigurosidad, como si fueses el profesor. Así detectarás cuáles son los fallos y dónde debes reforzar el estudio.
Lo ideal es que puedas recrear un ámbito similar al del examen, sin ruidos ni distracciones de televisión o celulares.
Finalmente, ten en cuenta que no solo los hábitos y técnicas de estudio garantizan un adecuado proceso de aprendizaje. Hay otros consejos que puedes seguir para mejorar el proceso de estudio y el resultado del examen.
Fuente: educalink